El mandato de 15 años de la primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, llegó a su fin el lunes, cuando huyó del país en medio de más de un mes de violentas protestas.
Blueprint informa que desde entonces los militares han asumido el poder y han declarado su intención de establecer un gobierno interino.
Hasina había tratado de sofocar las protestas en todo el país contra su gobierno desde principios de julio, pero huyó después de un brutal día de disturbios el domingo en el que murieron casi 100 personas.
“Queremos un Bangladesh libre de corrupción, donde todos tengan derecho a expresar su opinión”, dijo Monirul Islam, un hombre de 27 años entre miles de personas en las calles cercanas al palacio del primer ministro.
El jefe del ejército de Bangladesh, general Waker-Uz-Zaman, en una transmisión a la nación por la televisión estatal dijo que Hasina había dimitido y que los militares formarían un gobierno provisional.
“El país ha sufrido mucho, la economía se ha visto afectada, muchas personas han muerto; es hora de detener la violencia”, dijo Waker, vestido con uniforme militar, poco después de que multitudes jubilosas irrumpieran y saquearan la residencia de Hasina.
Al menos 20 personas murieron el lunes durante los actos violentos ocurridos en la capital de Bangladesh, dijo a la AFP Bacchu Mia, inspector de policía del hospital universitario médico de Dhaka.
Millones de bangladesíes salieron a las calles en todo el país del sur de Asia, muchos de ellos celebrando pacíficamente.
Multitudes jubilosas ondearon banderas, algunas bailando encima de un tanque en las calles, antes de que miles de personas atravesaran las puertas de la residencia oficial de Hasina.
El Canal 24 de Bangladesh transmitió imágenes de multitudes entrando corriendo al complejo, saludando a la cámara mientras celebraban, saqueando muebles y libros mientras otros se relajaban en las camas.
Sin embargo, las turbas también atacaron las casas de los aliados cercanos de Hasina, dijeron testigos a la AFP.
“Ha llegado el momento de hacerles responsables de la tortura”, afirmó el manifestante Kaza Ahmed. “Sheikh Hasina es responsable del asesinato”.
Waker dijo que las protestas deberían terminar y prometió que “se abordarán todas las injusticias”.
El oficial de infantería de carrera dijo que hablaría con el presidente para formar un gobierno interino en la nación de unos 170 millones de habitantes.
No quedó claro de inmediato si él lo lideraría.
Las fuerzas de seguridad habían apoyado al gobierno de Hasina durante los disturbios, que comenzaron el mes pasado contra las cuotas laborales de la administración pública y luego escalaron hasta convertirse en llamados más amplios para que ella renunciara.
Waker dijo que había mantenido conversaciones con los principales partidos de la oposición y miembros de la sociedad civil, pero no con la Liga Awami de Hasina.
Hasina, de 76 años, huyó del país en helicóptero, dijo a la AFP una fuente cercana al líder derrocado.
Una fuente de alto nivel en la vecina India dijo que Hasina estaba “en tránsito por el país pero se dirigía a Londres”.
